Es verdad que llevo algunos días sin escribir en el blog. Lo mejor de esto es lo que me iban diciendo mis buenos amigos que echaban de menos mis posts. Por varios motivos no escribía pero ahora vuelvo a ello, con la esperanza de alcanzar normalidad.El otro día leía una frase de Theodore Roosevelt que decía: " el ingrediente más importante en la fórmula del éxito es saber llevarse bien con los demás". En estos momentos de convulsiones es normal compararnos con los de al lado. Y esto es lo que nos conduce inexorablemente a la mediocridad.
Estos momentos son difíciles pero tenemos que tener en cuenta que la mayoría de las cosas que tanto nos preocupan no suceden jamás. Los problemas reales de la vida son cosas en las que no hemos pensado, son cosas que nos asaltan de manera fortuita en el momento menos esperado.
Todos tenemos que triunfar en la vida. Hemos llegado hasta aquí y tenemos que motivarnos y animarnos para ser los mejores, observando las dificultades por todos sus lados y encontrar las oportunidades dentro de ellas. Para encontrar el camino quizás tengamos que perdernos primero.
Todos tenemos un líder dentro que tenemos que liberar, dar el paso y asumir la responsabilidad de exigir lo que nos pertenece por derecho, buscando la excelencia en lo que hacemos todos los días en nuestro trabajo y fuera de él, y también por qué no, en nuestros comportamientos.
Tenemos más razón y poder del que realmente pensamos. En cada momento podemos elegir el papel que vamos a jugar de aquí en adelante y decidir qué queremos hacer para alcanzar el éxito. Sé lo que pienso de mi mismo, sé quién soy, conozco mi manera de ser y sé cómo me comporto. Tengo que cuestionarme todos los días lo que hago para reinventarme y seguir buscando que la experiencia de mi vida sea la mejor experiencia posible.
