Dijo una vez Václav Havel (político, escritor y dramaturgo checo): "La salvación de nuestro mundo se encuentra en el corazón de las personas, en su humildad, responsabilidad y capacidad de reflexión".
Me viene al pelo para agradecer a unos compañeros el periplo que he andado en los dos últimos años. Estos amigos han creído en mi y han depositado su confianza en mi persona, abriéndome sus corazones, sus hogares y, en definitiva, su vidas. Tengo que decir que se han convertido en seres muy especiales y que siempre me van a acompañar.
Llevo experimentando cambios profundos en mi desde hace algún tiempo, entendiendo de distinta manera la forma en la que tengo que relacionarme con las cosas, con mi entorno y con las personas, sirviendo de puente a muchas de ellas para encontrar un yo distinto del que conocían, encontrando también mi yo profundo, alcanzando cotas de evolución increíbles.
Y casi todo es fruto del descubrimiento, de mirar hacia adentro y ver que lo que tenemos podemos proyectarlo con fuerza para que nuestra vida sea completa, que esto va de felicidad y compartir con las personas. Tenemos que mirar adelante y ver oportunidades en vez de problemas, salir de nuestras cavernas y buscar nuevos horizontes.
Es verdad que la vida nos pone duras pruebas que tenemos que ir salvando, por eso tenemos que entrenar la fortaleza mental y la fortaleza de la amistad, ya que con estas dos variables vamos a convertirnos en invencibles.
Y como decía al principio hoy va de agradecimiento especial para un grupo que, sin nada a cambio, han estado y están junto a mi. Seguro que vamos a seguir compartiendo momentos y que vamos a estar muy cerca. Para todos vosotros unas GRACIAS muy especiales: Mª Ángeles, Araceli, Ignacio, Rafa, Nico y Fran.
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